viernes, 27 de noviembre de 2009

Pepita Turina


Josefa Alvina Turina Turina, conocida como Pepita Turina, nació en Punta Arenas, Chile, el 1 de marzo de 1907. Puso fin trágicamente a su vida el día de su cumpleaños, en Santiago de Chile, el 1 de marzo de 1986.
Sus cenizas fueron esparcidas el 21 de noviembre de 1990 en el Estrecho de Magallanes, como era su voluntad en declaración jurada el 7 de septiembre de 1967 en la Notaría de Horacio Soissa R. Ceremonia realizada por la Armada de Chile en la patrullera Ona, partiendo del Muelle que posee Asmar, carta náutica Nº 1140, latitud: 53º 10,8`; longitud: 70º 52,4`profundidad 52 metros. Asistieron solamente ocho personas entre ellos los escritores Eugenio Mimica Barassi y Martín Cerda.
Su fecha de nacimiento, que ella nunca dio a conocer, usando una frase que no clarificaba nada, “nací en Punta Arenas, en el primer cuarto de este siglo”. No lo consignó en ninguno de sus libros, y en las bibliografías sobre su vida los autores han dado las siguientes fechas 1902, 1903, 1909, 1912, 1913, 1915. Casi todos los expertos se han basado en las ediciones del Diccionario de la literatura chilena, de don Efraín Szmulewicz, que da equivocadamente el año 1909, 1º edición 1977 p. 447; 2º edición p. 383 y 3º edición p. 805. En la única obra que se consigno la fecha correcta es en “Olografías” libro para leer y contar, escrito por Oreste Plath. Con partida en mano de nacimiento y defunción.
Algunos periodistas la dan por nacida en Valdivia. Ello no es verdad, arribó de cinco años (1912) a esa ciudad por traslados de sus padres, y vivió hasta el año 1936, y por su matrimonio se trasladó a vivir a Santiago.
Ella sobre esta ciudad decía: "aunque Valdivia no es mi ciudad natal, por muchas razones yo la llamo mi pueblo. Es la ciudad donde me eduqué, donde aprendí a tocar el piano, donde escribí mi primer cuento, escribí mi primera novela, dicté mi primera conferencia y me casé por primera vez".
Hija de padres yugoslavos (precisamente croatas) Juan (Iván )Turina Baretic (escribieron sus apellidos Baretich o Varetic), (Krizisce a 3 km de Bakarac, 1864- Valdivia el 22/4/1926) e Isabel (Elizabeta) Turina Gudac (para algunos como Gudach o Guvach), Turinovo selo, 1868-Valdivia 10/3/1939). Turinovo selo, que quiere decir: pueblo de los Turina). Hay dos versiones, uno dicen que eran primos lejanos y otra que no eran parientes entre sí, pero en el pueblo, habían tres familias que llevaban ese apellido. En todo caso los dos pueblos están como a diez minutos caminando.
Son los primeros Turina que llegaron a Punta Arenas, Chile en 1892, y ellos, posteriormente trajeron a esta ciudad, a parte de los hermanos de su madre Isabel Turina Gudac. Ellos fueron: Rodolfo Turina Gudac, que murió en 1910, ahogado en el Estrecho de Magallanes, cerca de los 23 años, Antonia Turina Gudac, Felipe (File) Neri Turina Gudac, Juan (Iván) Turina Gudac, Nikica (Nicolina, Miha, Nokolina) Turina Gudac, Apolonia (Pola) Turina Gudac.
Su padre vino a Magallanes, en busca de oro, como decían en otras tierras que allí se encontraba.
En Punta Arenas no encontró oro, pero como era un trabajador excepcionalmente capaz para cualquier manualidad, sin haber hechos estudios especiales se dedicó a constructor. Era el tiempo en que en Punta Arenas se poblaba en forma intensa y faltaban viviendas, él construyó casas. Después instaló una de las más grandes carpinterías de Punta Arenas y uno de los mejores salones de patinar.
Sus padres llegaron a Chile ya casados en Yugoslavia, pero por problemas de papeles, se volvieron a casar en Magallanes (Punta Arenas) el 24 de junio de 1901.
Fueron una familia de 12 hijos: 3 hombres y 9 mujeres, de mayor a menor: Ramona (nacida en Yugoslavia (croata), Ana (nacida en Argentina). Los siguientes nacieron en Punta Arenas: María Rodolfo, Pierina (Petra), Catalina, Antonieta, Magdalena, Jacinto Juan, Alfonso Gregorio, Isabel Antonieta, siendo la menor Josefa Alvina.
Sus padres vivieron por 20 años en la ciudad de Punta Arenas, trasladándose el año 1912 a la ciudad de Valdivia, llegando solo con 6 hijos, dos habían fallecido y cuatro se habían casado.
En Valdivia lo persiguió al comienzo la mala suerte instalando diversas clases de negocios, Por último, en 1919, firme y perseverante en el trabajó, instaló la fábrica de biselados, espejos y marcos "La Nacional".
Su industria prosperó porque era la única de su especie en Valdivia.
Un accidente puso fin a su vida, el día 22 de abril de 1926, en circunstancias que ayudaba a descarga un cajón de cristales de 850 kilos que había adquirido, recién llegados de Bélgica.
Mientras se ocupa de esa operación ayudando a ocho operarios, el pesado bulto resbaló, se tumbo cayendo y aplastando su cuerpo, en frente de su casa-negocio ubicada en Chacabuco y Yungay.
Pepita Turina, se educó en el Liceo Fiscal de Valdivia hasta quinto año de Humanidades (1922) y estudió piano en el Conservatorio de Música de Valdivia, hasta el año 1927
Las alumnas más destacadas del maestro Francisco Cordero Carrera, entre ellas Pepita Turina, hicieron presentaciones en el Teatro Olympia y Edén de Valdivia, teniendo buena crítica en los diarios, después no continuó, porque tenía que venir a Santiago, a los cursos más avanzados.
Publicó sus primeros trabajos literarios en el diario “El Correo de Valdivia” en el año 1931.
Se le conocen dos seudónimos uno por un cuento que envió a la revista Zig-Zag el año 1926 y firmó Incógnita (y que no fue publicado) y Spleen en el Concurso Floral de las Fiestas Primaverales, Valdivia noviembre 1935, el cual fue premiado.
Aunque de ella algunas veces se dijo que había escrito poemas y ella lo negaba, se han encontrado cuatro poemas publicados: "Tono altivo" (se desconoce medio c.1935), "De los poemas sin nombre" Revista Primavera, Valdivia, 1935), "La soltera hacendosa" (diario El Heraldo de Ñuñoa 8/5/1937, p. 6) y Letanía de duda (antes al parecer se público en el diario El Correo de Valdivia c. 1935 y Diario El Heraldo de Ñuñoa 25/9/1937 p. 5), y 3 poemas sin publicar "Abre la puerta", "La llamada" y "No sé por qué"
Fue una de las fundadoras “Círculo de Difusión Cultural de Valdivia”, creado en 1935, a raíz de la publicación de su primera novela "Un drama de almas". El año 1936 fue secretaria de esta institución, siendo su presidente don Alvaro Bombal Murúa.
En esta entidad tuvo diferentes participaciones, desde conferencias, hasta tocar piano. También participa en estas actividades con quién sería su futuro marido Miguel Gómez Herrera.
Don Miguel recito junto a ella en el Centro de Difusión Cultural y también escribió para el Diario el Correo de Valdivia entre el año 1934 y 1935 y estando en Santiago escribieron ambos para el Diario El Heraldo de Ñuñoa y El Heraldo de Ñuñoa i Providencia, dirigido ambos por Francisco Javier Díaz.
El “Círculo de Difusión Cultural de Valdivia" desarrolló una intensa labor cultural, ideo La Semana del Arte, en la cuál se encontraba "El Primer Salón de Bellas Artes" (1936), al cual concurrieron las más destacadas firmas de la plástica chilena: Julio Ortíz de Zárate, Samuel Román, José Caracci, Arturo Valenzuela, Marco Bontá, Lorenzo Domínguez.
En 1936, se casó en la ciudad de Valdivia con el poeta Miguel Gómez Herrera (Santa Cruz de Colchagua 1897- Santiago de Chile 1939), del cual enviudó, sin hijos.
Miguel Gómez Herrera escribió diferente artículos, con los seudónimos de: el vecino Simón, Herrera, Pepe y X.
La escritora Pepita Turina y Oreste Plath, se conocieron el año 1939 en Santiago, cuando ambos eran casados.

Antes de casarse coincidieron sus trabajos en las revistas Diplomacia y gran mundo y Zig-Zag y el diario La Opinión de Santiago.
El 2 de Febrero de 1945, circunscripción Moneda a las 16. 30 hrs., en Santiago de Chile, contrajo matrimonio con el escritor, folklorólogo e investigador Oreste Plath (César Octavio Müller Leiva, nació en Santiago 13 de agosto de 1907, falleció en Santiago 24 julio de 1996), de esta unión nacieron el 28 de marzo de 1946 la pareja de mellizos Karen Plath Müller Turina (hija) y Carol Plath Müller Turina (hijo). En sus hijos no quiso perder el Plath, seudónimo de su esposo escritor, y se los puso por segundo nombre.
Su hijo Carol, le dio dos nietos Katrina Müller Botti (18 marzo 1972) enóloga y Sacha Müller Botti (18 de mayo 1976) médico, a los cuales adoraba, y no tuvo la dicha de verlos adultos.


viernes, 20 de noviembre de 2009

Juan Rulfo




Escritor mexicano nacido en Sayula (Jalisco) en 1918 y fallecido en Ciudad de México en 1986. Pertenecía a una familia acomodada que perdió sus bienes durante la Revolución Mexicana. Terminados sus estudios, ejerció diferentes trabajos, como empleos administrativos y labores de guionista en cine y televisión, hasta que en 1962 pasó a desempeñar un cargo en el Instituto Indigenista de México.
Escritor mexicano. Juan Rulfo creció en el pequeño pueblo de San Gabriel, villa rural dominada por la superstición y el culto a los muertos, y sufrió allí las duras consecuencias de las luchas cristeras en su familia más cercana (su padre fue asesinado). Esos primeros años de su vida habrían de conformar en parte el universo desolado que Juan Rulfo recreó en su breve pero brillante obra.

En 1934 se trasladó a Ciudad de México, donde trabajó como agente de inmigración en la Secretaría de la Gobernación. A partir de 1938 empezó a viajar por algunas regiones del país en comisiones de servicio y publicó sus cuentos más relevantes en revistas literarias.

En los quince cuentos que integran El llano en llamas (1953), Juan Rulfo ofreció una primera sublimación literaria, a través de una prosa sucinta y expresiva, de la realidad de los campesinos de su tierra, en relatos que trascendían la pura anécdota social.


En su obra más conocida, Pedro Páramo (1955), Rulfo dio una forma más perfeccionada a dicho mecanismo de interiorización de la realidad de su país, en un universo donde cohabitan lo misterioso y lo real, y obtuvo la que se considera una de las mejores obras de la literatura iberoamericana contemporánea
En 1956 hace, por encargo, una serie de fotografías de los patios de ferrocarril de Nonoalco-Tlatelolco.
En 1957, recibe el Premio Xavier Villaurrutia por Pedro Páramo.
Es la primera vez que se entrega este galardón.

En 1958 se traduce Pedro Páramo al alemán (primera a cualquier lengua), por Mariana Frenk.
A partir de esta versión se suceden sin interrupción las traducciones de la obra de Juan Rulfo a los idiomas más diversos.

En 1959, realiza, con Antonio Reynoso, el cortometraje "El despojo", filmado en el estado de Hidalgo.
En 1960, la familia Rulfo se traslada a Guadalajara.
Juan Rulfo trabaja en una empresa de televisión y prepara un libro sobre la historia de la conquista de Jalisco, como parte de una serie que esta empresa proyectaba publicar.

En 1962, la familia Rulfo se establece nuevamente en la ciudad de México.
Juan Rulfo comienza a trabajar para el Instituto Nacional Indigenista.
En 1964, se estrena la película "El gallo de oro", dirigida por Roberto Gavaldón, sobre una historia escrita por Rulfo.
Se filma "La fórmula secreta", dirigida por Rubén Gámez con un texto de Juan Rulfo.

En 1970 recibe el Premio Nacional de Literatura.
En 1980 Homenaje Nacional dedicado a Juan Rulfo.
Se realiza un acto en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes; se inaugura una exposición con su obra fotográfica y se presenta el libro-catálogo de la misma: Homenaje Nacional.

Se publica "El gallo de oro".

En 1981 se publica el libro de fotografías "Inframundo", con una selección muy parecida a la del libro-catálogo anterior.
En 1983 recibe el Premio Príncipe de Asturias.
En 1986 fallece en su casa de la ciudad de México el 7 de enero.

Su obra literaria muestra la vida del México rural con su atraso, sus miserias con una mezcla de mitos, obsesiones y fantasmas del caciquismo mexicano.
Es uno de los grandes escritores latinoamericanos del siglo XX, que pertenecieron al movimiento literario denominado "realismo mágico", y en sus obras se presenta una combinación de realidad y fantasía, cuya acción se desarrolla en escenarios y personajes que reflejan el tipismo del lugar, con sus grandes problemáticas socio-culturales entretejidas con el mundo fantástico.
Pero lo que, en última instancia, le preocupa a Rulfo es la exploración de algo intrínsecamente mexicano; pero también cabe sugerir que en su obra lo mexicano funciona como una metáfora de la condición del hombre en general.

Juan Rulfo dejó también un legado fotográfico de aproximadamente seis mil negativos, este material se encuentra en proceso de clasificación, por ello algunas fotografías no cuentan aún con una ldentificación definitiva.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Maria Dolors Alibés




La escritora Maria Dolors Alibés, autora de más de una cuarentena de libros infantiles, murió ayer a los 69 años en Sant Pau de Segúries (Girona). Probablemente el funeral no se oficiará en este municipio. La autora era original de Vidrà (Girona), donde nació en 1941.
Alibés colaboró con las publicaciones Cavall Fort y Tretze Vents', y con los medios de comunicación Catalunya Ràdio y Avui.







Entre sus obras destacan.






Máquinas de empaquetar humo y otros inventos),





















Un verano de perros.
La autora se mantuvo activa hasta el último momento, ya que este mismo año publicó los que fueron sus últimos títulos:






















Un boton lloron










viernes, 13 de noviembre de 2009

Roberto Bolaño



Roberto Bolaño nació en Santiago de Chile el 28 de abril de1953. A los 13 años, se trasladó con su familia a México. Vivió su adolescencia concentrado en la lectura, encerrado durante horas en la biblioteca pública de Ciudad de México.

En 1973 decide volver a Chile con el propósito de apoyar el proceso de reformas socialistas de Salvador Allende. Tras un largo viaje en auto por Sudamérica, llega a Chile días después del golpe de Estado protagonizado por Augusto Pinochet, por lo que decide unirse a la resistencia contra el nuevo orden dictatorial. Pocos días después es detenido cerca de Concepción y liberado luego de ocho días gracias a la ayuda de un antiguo compañero de estudios en Cauquenes que se encontraba entre los policías que debían custodiarle.

Regresó nuevamente a México, donde junto al poeta Mario Santiago (quien servirá de modelo para Ulises Lima en Los detectives salvajes) funda el movimiento poético infrarrealista, que, surgido a partir de reuniones y tertulias en el Café La Habana de la calle Bucarelli, se opuso radicalmente a los poderes dominantes en la poesía Mexicana, especialmente a Octavio Paz y sus seguidores. Sin embargo dicho movimiento nunca logró salir de la marginalidad, y sólo fue conocido luego de la muerte de Bolaño.

Luego emigró a España, concretamente a Cataluña, donde ya vivía su madre. Allí desempeñó diversos oficios: vendimiador en verano, vigilante nocturno de un camping en Castelldefels y vendedor en un almacén de barrio.


Bolaño se presenta en algunas de sus obras (como Los detectives salvajes o Amuleto) como su alter ego, Arturo Belano. También aparece retratado en las novelas Soldados de Salamina de Javier Cercas y en Mantra de Rodrigo Fresán.

En 1998 se hizo acreedor del Premio Herralde de novela gracias su obra Los detectives salvajes. También, gracias a la misma obra, obtuvo el Premio Rómulo Gallegos en 1999.

Sus últimos años
Tenía 50 años y era el mejor escritor latinoamericano vivo. Por varios cuerpos. En junio del 2002, el diario Le Monde le dedicó la portada de su suplemento de libros y en el artículo central anotaba: "¡Cómo brillan las estrellas de Roberto Bolaño! Crueles, es cierto, a veces vanidosas o influenciables, pero también frágiles como el cristal, agudas, palpitantes y radiantes de una luz sin paralelo".

El 14 de julio de 2003, a las 20.00 hora chilena, 15 de julio en España, este "escritor asombroso", como lo calificó la crítica francesa, murió producto de una insuficiencia hepática, en el hospital Vall d'Hebron, de Barcelona.

Bolaño vivía hace dos décadas en España, en la localidad de Blanes, a 45 minutos de Barcelona. Sufría de una insuficiencia hepática y necesitaba someterse a un trasplante de hígado. Estaba en el segundo lugar de una lista de espera, 10 días antes de su muerte sufrió una hemorragia interna y entró en shock hepático.

Según fuentes cercanas a la familia, ingresó al hospital el sábado 5 de julio y durante la última semana permaneció en un estado de semiinconsciencia. Pese a los esfuerzos de los médicos, no fue posible estabilizar su estado de salud para someterlo a un transplante urgente, y fue prácticamente desahuciado. A esas complicaciones se sumaba el hecho de que tenía sangre B, un tipo escaso.

"Es un tipo de sangre que tienen los que han escrito Los Detectives Salvajes", dijo a La Tercera el 19 de junio de 2003, citando la obra que le dio celebridad continental y por la cual obtuvo el Premio Herralde, el Consejo Nacional del Libro y el Rómulo Gallegos 1999, galardón que lo tiene como único chileno.

Su madre y su familia -su esposa Carolina, sus hijos Lautaro y Alexandre- se encontraban con él. La enfermedad lo había obligado a postergar la publicación de su próxima novela, 2666, un relato sobre los asesinatos de mujeres en Ciudad Juárez, México, en la frontera con EE. UU.

"Son más de mil páginas que tengo que corregir, es un trabajo como de minero del siglo XIX, como en Subsole. Procuro ahora hacer un trabajo más reposado. Voy a corregir la novela sólo después de la operación", dijo esa vez y anunció, a cambio, un libro de cuentos, El Gaucho Insufrible.

En ese conjunto de cuentos, Bolaño escribió un texto sobre su mal, Enfermedad + Literatura: Enfermedad, y un cuento-ensayo sobre la narrativa hispanoamericana, en el que arremete contra el boom y el postboom. "Creo que va a sacar chispas, porque no queda títere con cabeza. Es un texto que responde a la idea del ataque gratuito parriano y al gusto de joder la paciencia".

He ahí Bolaño: talentoso y provocador. "Terrorista camaleón, heredero inquieto de Borges y descendiente revoltoso de Cortázar", según Les Irockuptibles, su obra está hecha de imaginación, biografía y humor.

Con Los Detectives Salvajes, consiguió el aplauso unánime de la crítica. Tuvo una relación intensa y difícil con Chile, en especial por sus duras opiniones sobre los escriores locales; pese a ello -o por ello - y por su obra, se transformó en una suerte de ídolo para los nuevos escritores.


2666: Su libro póstumo
2666 es la novela póstuma de Roberto Bolaño, de más de mil páginas, con la que deja su testimonio vital en forma de ficción y resume toda su obra, expresando todos sus miedos e ideas, su amor por México, los recuerdos de su Chile natal o las visiones del neoimperalismo americano y la difícil vida de la frontera sur de los Estados Unidos, llena de empresas de economía sumergida, desesperados dispuestos a cruzar a cualquier precio a la tierra de las promesas, y los horribles crímenes que parecen no tener fin.

En 2005, dos años después de su muerte, obtiene el premio Salambo a la mejor novela escrita en castellano, por su libro 2666. El jurado del premio destacó el nivel y diversidad de los cinco finalistas, todos ellos "libros nobles, respetables y muy notables". Y se refirió a la novela ganadora, como"el resumen de una obra de mucho peso, donde se decanta lo mejor de la narrativa de Roberto Bolaño". Una novela que "contiene mucha literatura, que supone un gran riesgo y lleva al extremo el lenguaje literario" de su autor.

Tras su muerte numerosos homenajes y ensayos fueron publicados por los intelectuales chilenos y españoles en periódicos de todo el mundo.