El director de 12 hombres en pugna falleció ayer en su hogar de Manhattan, a los 86 años, debido a una leucemia.
Filadelfia, Pensilvania, 25 de junio de 1924 - 9 de abril de 2011), fue un director de cine de Estados Unidos.
sus padres eran el actor judío de origen polaco Baruch Lumet y la bailarina Eugenia Wermus. Se graduó en el Professional Children's School y Lumet fue actor antes que director. Hizo su debut en el Yiddish Art Theater de Nueva York a la edad de cuatro años y actuó en teatros judíos de Broadway durante la década de los 30 hasta que debutó en el cine con la película One Third of a Nation (1939). En 1947 empezó a dirigir sus propias obras de teatro en el off-Broadway y dirigió a personas como Yul Brynner, Eli Wallach y otros miembros del Actor's Studio. Lumet haría su debut detrás de la cámara al principio de los 50 como director de televisión en la CBS. En ella destacaban los 150 episodios de la serie "Danger" (1950) y los 26 de "You Are There" (1953).
En el 2005 recibió el Óscar honorífico por su trayectoria. Sus películas más recientes son Declaradme culpable (Find Me Guilty) (2006), que se basa en la historia real de Giacomo "Jackie Dee" DiNorscio, y Before the Devil Knows You're Dead (2007), cuya trama gira en torno a dos hermanos que organizan el robo de la joyería de sus propios padres, pero el plan no resulta tan perfecto como estaba previsto. Estas dos últimas obras de un Sidney Lumet octogenario, y en especial la más reciente, han mejorado el prestigio crítico del director
Y es curioso que un director que debutara con una absoluta obra maestra nos haya dejado, hace poco (y cinco décadas más tarde), una nueva muestra de su talento como director. Sabe narrar como pocos, con brío, haciendo fluir los diálogos entre la acción y nos ha dejado un buen puñado de títulos soberbios. Pero para no abrir el abanico en exceso, me quedo con seis películas imprescindibles para disfrutar del mejor Sidney Lumet.
‘Doce hombres sin piedad’ (1957), el debut
No hay mejor forma de debutar el cine que con un título así. Tuvo suerte de contar con ingredientes que le facilitaron lograr un resultado tan notable: el guión de Reginal Rose, la fotografía de Boris Kaufman y un puñado de actores con garra, encabezados por el sublime Henry Fonda. Una película asombrosa, claustrofóbica, con una atmósfera densa que te arrastra hasta el final. Pura tensión y una película para estudiantes de cine, de la que se puede aprender mucho.
‘El príncipe de la ciudad’ (1981), un guión magistral
Lumet es un director bien dotado para el thriller y con este trabajo lo volvió a demostrar. Firmó un guión (coescrito con Jay Presson) soberbio, siguiendo la línea de ‘Sérpico’ sobre un policía de Nueva York que decide, tras presiones políticas, llevar una investigación para desenmascarar la corrupción policial. La película está llena de tensión y retrata a la perfección la trama de corrupción en el seno de la policía. También los actores están brillantes, destacando su protagonista interpretado por Treat Williams
‘Tarde de perros’ (1975), Pacino y los 70
Una película de poderosa puesta en escena, que contó con un enorme trabajo de Al Pacino (y no menos de John Cazale) y que es una buena muestra del cine de los 70. Está basada en hechos reales sucedidos en Brooklyn, sobre un atraco a un banco convertido en acontecimiento mediático. Un arranque impresionante y una cinta que no decae en ningún momento, con una narración inspirada, escueta pero contundente. Imprescindible.
‘Network (Un mundo implacable)’ (1976), inspirada y brillante
En esta ocasión Lumet se centró en el mundo de la televisión, el poder, la ambición, la ética, la competitividad,… quizás lograr uno de los mejores retratos sobre la búsqueda del éxito en el entorno televisivo. También es cierto que la brillantez de la realización se vio enormemente acompañada por un plantel de actores de diez. Un reparto de altura que dio como lugar escenas inolvidables. Mucho éxito le reportó a Lumet, en esta ocasión con guión de Paddy Chayefsky.
‘Veredicto final’ (1982), emoción con un Paul Newman sobresaliente
Volvió a dejarnos Lumet una nueva aproximación al cine de tribunales, de abogados, de intriga,… Un drama acertadísimo que forma parte también de los mejores trabajos del gran Paul Newman. Que encarnó a un fiscal en horas bajas, apoyado en el alcohol que encuentra su resurgir en un caso en el que pone toda su energía. El reflejo humano del personaje, como lo aborda y nos enseña su alma es magistral, y en gran parte a un excelente guión de David Mamet.
‘Antes que el diablo sepa que has muerto’ (2007), un thriller soberbio
Tras algunos años en decadencia, pero sin dejar de trabajar, Sidney Lumet nos regaló recientemente una obra sensacional. De nuevo rodeado de un gran plantel de actores, especialmente inspirado Philip Seymour Hoffman, y un gran guión al que sabe sacar partido. Una historia dramática en torno a dos hermanos de una familia burguesa, uno ambicioso y adicto a la heroína y el otro que apenas sobrevive pagando la pensión de su ex mujer. Ambos se unen para un atraco que les alivie de su situación económica pero nada sale como esperaban. Explosiva y con diálogos sublimes.
Naturalmente, hay más títulos con los que se podría hacer una selección similar: ‘Sérpico’, ‘Equus’ o ‘El prestamista’ también merecen destacarse como de lo mejor y más representativo de Sidney Lumet.